lunes, 15 de agosto de 2011

LONDRES

Todo el mundo dice que Londres era una ciudad segura y los sucesos de la semana pasada han hecho cambiar la percepción sobre la ciudad. Cuando he visitado esta ciudad me ha parecido una ciudad vulnerable y los barrios del este y del norte peligrosos. De todas formas, como ocurrió en Noruega, esto era previsible a tenor de lo que se en las gradas de los campos de futbol series de TV y vida nocturna.
Pero de eso no quiero hablar, lo que quiero comentar es que estos actos delictivos son una muestra más palpable de como el Estado del Bienestar está de capa caida. No lo digo con alegria, esto es una especie de segunda caida del muro de Berlín. La izquierda ante la situación de ver como los modos del comunismo no encuadran en una sociedad democrática, piensan en una solución que tiene que ver con el comunismo. Todos iguales, pero aprovechando el dinero del sistema capitalista. Eso trae como consecuencia que la lucha contra la desigualdad nos introduce en el mundo del subsidio.
Estos encapuchados son personas que no han trabajado nunca, que el sistema de la escuela comprensiva (otro gran invento de la izquierda europea) no les han enseñado nada e hijos de un sistema divorcista donde la figura del padre ha sido machacada y ahora se le necesita porque al no estar papa en casa, ellos están en la calle haciendo de todo, pero con ropa cara, el mobil de última generación en sus manos, drogándose y bebiendo. Cuando se les quita el subsidio, se frustran y a robar. Cuidado, en España esto puede suceder en unos meses.
Esta crisis no es económica, es moral, lo peor es que la derecha tampoco tiene claro la solución, porque la izquierda por lo que se ve no quiere entender que ellos son el problema, porque son los inventores de este disparate.
¿Puede haber una solución intermedia entre liberalismo y socialismo? Creo que el Tea Party tiene un poco de esa solución. Desde el punto de vista de la ideas políticas el Republicanismo es esa via.

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